Además de las uvas y las pasas a granel, muchos de las
comidas y postres navideños contienen piel, pulpa, semillas o jugo de uva. Esta
fruta produce una toxicidad renal aguda. La dosis letal no ha sido establecida
y la tolerancia a este producto varía según el individuo.
La dosis mínima que ha causado fallo renal en perro ha sido
de 2,8g/kg de uvas frescas y de 3g/kg de uvas pasas.
1.
¿Cuáles son los signos clínicos y cuándo
aparecen?
Los primeros signos clínicos aparecen entre las 6 y las 24
horas tras la ingesta. Y son: vómitos, diarrea, hipersalivación, debilidad,
ataxia, letargia, heces y vómitos con sangre en los que se puede observar
restos de uvas.
Tras 24-72horas se desarrolla un fallo renal agudo con
oliguria o anuria. En algunos casos también aparece bradicardia, taquicardia,
hipo o hipertermia, anemia, depresión respiratoria, cianosis, temblores,
rigidez y convulsiones.
2.
¿Cómo se
diagnostica?
Historia de ingestión de uvas o sus derivados y los síntomas
clínicos que presenta el perro. Además
es necesaria la realización de pruebas complementarias como analítica sanguínea
para confirmar y valorar el nivel de daño renal producido.
3.
Tratamiento
Provocar emesis si la ingesta se ha producido en las 2-4
horas previas.
Si se ha producido un daño renal sería necesaria
hospitalización para una fluidoterapia agresiva y control de los posibles
desequilibrios electrolíticos presentes.
4.
Pronóstico
El pronóstico es bueno si el tratamiento se establece antes
de la aparición de los signos renales, pero el pronóstico es reservado-malo en
perros con oliguria o anuria.
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